Mallorca es uno de los destinos turísticos más conocidos a nivel mundial. La isla más grande de Baleares cuenta con 500 kilómetros de costa, aguas turquesas y calas y playas que son la envidia de todos.
La primavera y el verano son las mejores épocas para viajar a Mallorca. Durante los meses de mayo y septiembre podrá disfrutar de días de sol si bien durante la primavera se encontrará una isla mucho más calmada, con menos turistas, y podrá conocer con más tranquilidad su cultura e historia.
Los pueblos que merece la pena visitar son muchos y diferentes. En Mallorca pueden disfrutar de bellos paisajes rurales y montañosos o de los más increíbles atardeceres de playa.
Su variedad de escenarios y su clima la hacen un destino perfecto para disfrutar en familia. Como ya sabrá viajar con niños supone una mayor organización, así como prever planes entretenidos.
La isla también ofrece múltiples opciones en este caso. Veamos algunas ideas que no dejarán indiferente a los más pequeños:
- Visita guiada por Palma: La capital balear es rica en cultura, historia y arquitectura. Este plan es interesante para conocer joyas como la Catedral de Palma, el Palau Reial de La Almudaina, antigua fortificación donde vivían los reyes de Mallorca o la Plaza de Cort desde donde puede disfrutarse de la fachada del Ayuntamiento. Apuntándose a cualquiera de los denominados free tour podréis disfrutar de explicaciones adicionales.
- Palma Aquarium: Un día de diversión para todos. Más de 700 especies y 8.000 animales os darán una visión muy completa del fondo marino. Además, el personal animará a los pequeños a conocer y cuidar los animales, bucear con rayas o tiburones e incluso podréis realizar snorkel.
- Tren histórico de Palma a Soller: El tren parte de Palma para realizar un recorrido de 27 kilómetros perdiéndose por los frondosos paisajes del interior de Mallorca hasta llegar al Puerto de Soller donde se puede tomar un tranvía que recorre la costa del municipio finalizando en la antigua estación ferroviaria.
- Excursiones a cuevas y grutas: Como ya se ha mencionado la orografía de Mallorca es muy variada y también puede disfrutarse de impresionantes cuevas que serán toda una aventura para los pequeños. Algunas de las que merecen una visita son las Cuevas de Drach, las de Génova o Campanent.
- Autobús turístico de Palma: Un plan atractivo para hacer turismo sin cansarse. Este autobús realiza paradas hasta en 20 puntos de interés y adquiriendo un ticket podréis subiros y bajaros todas las veces que queráis en un mismo día.
- Otras actividades: Alquilar unas bicicletas de montaña para recorrer la costa o los variados parques naturales es una opción saludable, divertida y económica. Los más aventureros pueden decantarse por espeleología, saltos de acantilados…
Además de las actividades en el exterior es también importante elegir un sitio en el que descansar que cuente además con opciones de ocio variadas para toda la familia.
Una fantástica opción es BelleVue Club, ubicado en el encantador pueblo de Alcudia y con una extensa oferta lúdica y gastronómica. Cuenta con ochos piscinas, pistas de tenis y squash, circuito de karts y varios restaurantes que ofrecen comida italiana, mediterránea e internacional.
¡Un resort en el que el aburrimiento no tiene cabida!
